Uno de los fichajes más controvertidos de los últimos tiempos en Mediaset España fue, sin lugar a dudas, el de Rocío Flores. El grupo de comunicación vio conveniente incorporar a sus filas a la hija de Rocío Carrasco tras la auténtica revolución social que se produjo durante la emisión de ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’, pero sus constantes polémicas que viraban hacia la contradicción se han traducido en un rotundo adiós.
Echando la vista atrás, la “estudiante de Nutrición” debutó como colaboradora en la sección de sociedad de ‘El programa de Ana Rosa’ con el objetivo de hablar de ‘Supervivientes’, aunque la realidad distó mucho de aquel planteamiento. Sin embargo, su primera intervención televisiva llegó con la entonces liviana tarea de defender a Antonio David Flores en ‘Gran Hermano VIP 7’. Quién nos iba a decir en aquel momento que la imagen del novio de Marta Riesco terminaría devastada por méritos propios.
Sin ánimo de obviar todas las evidencias planteadas por La Fábrica de la Tele, es necesario centrarnos en la cronología que ha llevado a Rocío Flores a desaparecer de las pantallas de Telecinco. Los constantes órdagos lanzados a su madre desde ‘AR’ distaban mucho de esas lágrimas que llegamos a presenciar mientras imploraba que su madre la llamase por teléfono. Eso sin olvidar tampoco que Rocío Carrasco ya avanzó que intentó ponerse en contacto con ella en reiteradas ocasiones recibiendo un silencio como respuesta.
Los rostros del matinal de Telecinco, o al menos buena parte de ellos, protegían a una mujer sin bagaje televisivo y aconsejada tanto por su padre como por su representante. Sin embargo, hubo dos figuras de Mediaset España que entonaron las críticas como pocas personas habían hecho hasta el momento. La primera de ellas fue Sofía Suescun durante la participación del hoy novio de Marta Riesco en ‘Gran Hermano VIP’: “Tanto defenderla y luego le deja en Nochebuena sola. Más de dos días no paso separada de mi madre, lo que no es normal es estar ocho o diez años separada de su madre. No vayamos con la coronita, santa Rocío”.
Así se convertía la ganadora de ‘Supervivientes 2019’ en el azote de la influencer; de hecho, ella solo era capaz de interrumpir con un “me levanto y me voy”. No obstante, es necesario destacar que la natural de Navarra también se alzó contra Antonio David Flores en otra ocasión, reiterando que sus labores frente a cámara eran única y exclusivamente méritos de Rocío Carrasco: “¡Guárdale tú el respeto a la madre de tu hija, que la tiras siempre por tierra!”, sentenció con un nivel de nervios que se percibía al otro lado de la pantalla.
Tirando de hemeroteca, existe otro momento de lo más controvertido protagonizado por la nieta de Rocío Jurado mientras aseguraba “estar cansada” desde el Estudio 6 de Mediaset España. El Maestro Joao no desoyó a las redes sociales y recogió el guante para convertirse en una feroz réplica: “¿De qué estás cansada, hija mía? De llevar esa estrella que pesa tanto. Coño, ¡estás sentada toda la noche! ¿De qué estás cansada?”, exponía en ‘Tierra de nadie’ durante junio de 2021. Los aplausos al vidente provocaron una brutal reacción en su interlocutora, quien llegó a enfrentarse tanto al regidor como al propio Carlos Sobera.
El siguiente planteamiento fue la respuesta de Rocío Flores a su falta de apoyo: “¿Ahora no hay aplausos? De puta madre”, expresó de lo más tensa. Estas intervenciones nocturnas se complementaban con sus participaciones en ‘El programa de AR’, donde vio conveniente responder a todo lo que se hablaba sobre su persona tras las declaraciones de su madre en las respectivas docuseries. De hecho, vino a asegurar que se iba a “caer España” el día en el que relatase su verdad. Al poco tiempo, ‘Socialité’ emitió unas conversaciones donde su representante guiaba sus pasos y sugería que reprodujese exactamente esa misma oración en directo.
La polémica nunca ha estado próxima a agotarse, más bien todo lo contrario. Sin embargo, lo que queda claro es que no podía mantenerse un personaje así a la vez que ‘En el nombre de Rocío’ estaba en emisión y, tras el verano, hubo un cambio de rumbo. Los medios se lanzaron a publicar que la colaboradora no había llegado a un acuerdo económico para seguir tomando asiento en el sofá junto a Ana Rosa Quintana. Simplemente, era cuestión de tiempo y, al fin y al cabo, la crónica de un silencio anunciado a consecuencia de la difícil tarea de contradecir hechos probados y demostrados a lo largo del tiempo.