Santi Acosta vuelve a Telecinco. Tras conducir el especial Ana sobre Ana Obregón el pasado mes de abril, el presentador regresa de nuevo a la que fue su casa, pero esta vez con la intención de echar raíces. Ya lo hizo a principios de siglo con Salsa rosa (2002-2006), el programa más célebre de su carrera, y ahora intentará hacer lo propio con ¡De Viernes!, la nueva apuesta del canal para impulsar, claro está, la noche de los viernes, que en los últimos meses ha vivido la cancelación del Deluxe y el efímero paso de La última noche.
“Hay datos que avalan que este es un proyecto de futuro, como tener un pedazo de equipo, buenos contenidos y una cadena que te avala. Pero claro que me tiemblan las piernas pensando en que puedan ser sólo tres programas”, reconoce Acosta durante su encuentro con verTele y otros medios, celebrado de cara al estreno de este viernes 24 de noviembre (22:00 horas).
Aun así, el madrileño confía en las posibilidades de este nuevo formato de Producciones Mandarina, que pretende recuperar el lado más puro del género de corazón. “La televisión ha evolucionado mucho y en un momento dado se dejó de hacer corazón porque ha habido mucho reality”, dice el madrileño en relación a Sálvame, “un magnífico programa que era principalmente un reality con sus personajes, maravillosos todos ellos”. Entre ellos, el que fuera su líder, al que Acosta también dedica buenas palabras: “Jorge Javier no tiene sucesor posible, es un crack (…) En un plató no hay nadie más rápido que Jorge Javier”.
Él, sin embargo, tiene otro estilo. Y De Viernes, que copresentará cada semana junto a Beatriz Archidona, también. “Corazón es escuchar a la gente, y lo que vamos a hacer en televisión es corazón”, señala en este sentido.
¿Qué diferencias ves entre este programa y ‘Salsa rosa’? A tu juicio, ¿cómo ha cambiado la televisión desde entonces?
La televisión ahora es mucho más rápida. La influencia de las redes sociales es brutal y marcan el ritmo de lo que la gente ve. Si a mis hijos les pones un programa como Salsa rosa, posiblemente les parecería un poco anticuado. La televisión ha evolucionado mucho y en un momento dado se dejó de hacer ‘corazón’ porque ha habido mucho reality. Sálvame, un magnífico programa, era principalmente un reality con sus personajes, maravillosos todos ellos. ‘Corazón’ es escuchar a la gente, y lo que vamos a hacer en televisión es ‘corazón’, que me gusta mucho porque mi profesión siempre ha sido escuchar las historias de gente que es maravillosa, da igual que sea un albañil o el rey o el presidente de Estados Unidos.
Entonces, ¿no metes a ‘Sálvame’ en el género del corazón sino del reality’?
Sin ser yo un catedrático, creo que se asemeja más al reality, con sus propios personajes aunque de vez en cuando viniera gente de fuera. Es un magnífico programa, con un magnífico presentador porque en un plató no hay nadie más rápido que Jorge Javier.
Has estado haciendo documentales, ¿cómo has vivido tu regreso a Telecinco?
Sí, sigo haciéndolos en paralelo. Aquí [en Mediaset] te recibe todo el mundo fenomenal, y un proyecto como este me hacía ilusión.
¿Sientes responsabilidad por ser el abanderado del corazón que vuelve a Telecinco, quizá como sucesor de Jorge Javier en la noche de los viernes?
[Ríe] Jorge Javier no tiene sucesor posible, es un crack. Lo que me hace sentir responsable es que hay un equipo con un montón de gente que confía en que tú eres la cara de todo su proyecto.
Después de una etapa en la que el entretenimiento sustituyó al corazón, ¿queréis que os den tiempo para que la gente vuelva a acostumbrarse al corazón los viernes por la noche?
Esto es una televisión comercial. Te dan el tiempo que te dan, depende de cómo esté la cadena y cuál sea la franja: el prime time es mucho más duro que la mañana o la tarde. Aquí [en la franja de noche] la cadena se juega más dinero y entiendo que si la cosa no va bien, a cualquier programa lo retiran en poco tiempo. Nos ha pasado a todos a lo largo de nuestra carrera, es parte del juego. Yo creo en este proyecto porque creo en el entretenimiento. Cuando ves el informativo acabas deprimido, así que quiero divertirme el viernes por la noche; ya me encargaré de los problemas a la mañana siguiente, pero quiero un ratito de esparcimiento para no volverme loco. Necesitamos ese entretenimiento.
El público está acostumbrado a un corazón más ‘agresivo’, ¿le costará a la gente entrar en formato que tratará mejor a los invitados?
Habrá a quien le guste más ese otro formato, y es absolutamente respetable, pero esta es otra oferta y queremos saber si tiene hueco.
Pero, ¿habrá marcha?
Habrá marcha, sí. Intentaremos tener un punto gamberro, en el buen sentido, pero cuidaremos a la gente. Es algo que iremos viendo, esto es una declaración de intenciones.
¿El invitado estará en plató?
Habrá que ver el programa para descubrirlo. Yo voy a intentar que sí.